Mochileando en Melbourne: El comienzo de la aventura en Australia
Melbourne Marzo 2019
Llegada a Melbourne
La llegada a Melbourne fue larga; el vuelo me tomó más de 14 horas. Muchos pensamientos estaban en mi mente: ¿Lo estoy haciendo bien? ¿Estoy tomando malas decisiones? Sin embargo, ahí estaba, cruzando el océano cerca de la Antártida con una mezcla de sentimientos que solo los que toman la decisión de migrar conocen.
Emprender sola y salir de la zona de confort a los más de 30 años me enfrentaba a las expectativas conservadoras de mi familia, que esperaban que ya estuviera casada y con hijos, además de la incertidumbre de haber renunciado a una carrera estable.
Llegué a Melbourne después del mediodía, una ciudad desconocida. Preguntando dónde tomar el transporte hacia la ciudad, hacía calor y me sentía sudada después de viajar tantas horas. El único objetivo que tenía en mente era llegar al hostal, ducharme y descansar. Llegué al lugar preguntando con mi inglés básico las indicaciones para encontrar la calle que necesitaba. Me indicaron que debía tomar el Tram, un pequeño tranvía que es gratis en la ciudad. No pagar el tranvía fue WOW, se nota que no estoy en mi país.
Primeros Días en el Hostel
Mi primer destino fue un hostel en Melbourne, donde pagué por una habitación compartida con otras cinco mujeres. Al llegar, conocí a varias chicas de diferentes países asiáticos, todas amables y acogedoras. Después de una ducha rápida, comí algo ligero y me dormí, solo para despertarme a las 3 de la mañana, sintiendo el peso del cambio de horario, la nueva comida y el aire diferente.
Adaptándose a la Nueva Vida
El día siguiente fue agotador, pero había cosas por hacer. Fui al banco a abrir mi primera cuenta australiana en Commonwealth, contraté un plan de celular y compré mi tarjeta de transporte, la Myki. También llamé para obtener mi TFN (Tax File Number), esencial para trabajar y pagar impuestos en Australia. Durante esta semana conocí a muchos otros viajeros, especialmente un grupo de argentinos que me dieron valiosos consejos sobre cómo adaptarme.
Libertad y felicidad esos eran mis sentimientos viviendo en Melbourne
Con mi inglés me defendí, pero a veces me sentía como Tarzán. Sin embargo, en vez de frustrarme, me reía. Pregunté mucho, leí bastante, y una nueva persona nació en esa ciudad. Australia me estaba enseñando a encontrarme con mi propia personalidad, que había estado dormida por muchos años.
Viví más de dos meses en Melbourne, en un hostal donde conocí a mucha gente, los que pasaron a ser mi familia multicultural. Me di cuenta de que no era la única que tenía el sueño de viajar y ver el mundo. No importaba en qué parte del planeta estuviera, siempre había alguien que estaba en la misma situación.
Descubriendo las calles de Melbourne
Preparándose para el Trabajo
Después de explorar varios lugares de Melbourne, llegó el tiempo para postular a trabajos. Mandé varios currículums, sin embargo, sin respuesta. Estaba totalmente equivocada con mi hoja de vida; tenía que crear una que se adaptara a lo que estaba postulando. Mira este post de cómo encontrar trabajo Working Holiday Australia.
En Melbourne me di cuenta de que hay varios lugares que ofrecen charlas gratuitas, que te enseñan cómo hacer currículum y a qué trabajos podía postular. Había charlas en inglés, portugués y español, así que me dieron muchas buenas ideas. Sin embargo, mi objetivo no era quedarme en la ciudad.
Esta charla fue entregada por una agencia de estudios, Spiible, que ayudaba a personas para estudios y migración. Aparte de ir a la charla, hice un curso de barista. En mi vida había visto tantos estilos de café; para mí era agua y café listo, pero no acá. Hay una cultura del café, los sirven de distintas maneras, leches, espuma, es todo un mundo. Yo no tomaba café en Chile y tampoco me interesaba, pero pagué el curso para aprender a hacer café con la máquina. Además, hay un curso para servir licor en bares y restaurantes. Australia tiene reglas estrictas con respecto al alcohol que para nosotros no existen. Creo que pagué sobre 100 dólares australianos entre los dos cursos.
Responsible Service of Alcohol - RSA
Otra cosa importante en Melbourne fue ir a la embajada a traducir mi licencia de conducir en caso de que me tocara manejar. Consulado General de Chile en Melbourne.
Así fueron pasando las semanas hasta que tomé la decisión de irme hacia el norte. La idea era seguir el verano. Un amigo americano me recomendó escapar del frío del invierno y aprovechar de viajar con la visa de trabajo. Creo que fue lo más acertado que hice en ese tiempo. Después de algunas conversaciones, finalmente me iría al norte con una amiga chilena a Cairns, sin tener trabajo, sin embargo, nos las arreglaríamos en el camino. Así le dije adiós a Melbourne por algunos meses.
Consejos y Errores
Aciertos:
Solo pagar 3 días de alojamiento en un hostal céntrico que me permitió conocer gente y movilizarme.
Utilizar mapa offline MAPS.ME.
Forzarme a hablar en inglés aunque fuera improvisado, en todo momento. Me obligué a salir con personas que solo hablaran inglés.
Traer solo mi mochila.
Traducir mi licencia de conducir, revisar si tu visa te da traducciones gratis.
Errores:
Contratar plan telefónico por un año sin saber mis opciones. Todo depende de dónde quieres vivir y trabajar.
Cargar la tarjeta de transporte público sin saber si la iba a utilizar todos los días.
No tener una dirección de una amiga/conocido para que el banco me enviara las cartas.
No traer pisco.
Explorando Lugares Interesantes
Lugares recomendados:
Westgate Park: Conocido por su lago rosado, un fenómeno natural que ocurre durante los meses de verano.
The Heavenly Queen Temple: Un hermoso templo chino ubicado a orillas del río Maribyrnong.
Playa Saint Kilda: Una playa icónica con un muelle histórico, ideal para pasear y disfrutar del paisaje.
Royal Botanic Gardens Victoria: Jardines botánicos amplios y bien cuidados, perfectos para un paseo relajante.
The Shrine of Remembrance: Un importante memorial de guerra con vistas impresionantes de la ciudad.
Reflexión Final
Melbourne fue el primer capítulo de mi aventura australiana. Me dio la oportunidad de reconectarme conmigo misma, hacer nuevas amistades y disfrutar de una ciudad vibrante y llena de vida. Al final, tomé la decisión de seguir mi viaje hacia el norte, escapando del frío y aprovechando mi visa de trabajo. Si estás buscando una experiencia auténtica como mochilero en Australia, Melbourne es el lugar perfecto para comenzar.
¡No te pierdas la oportunidad de vivir esta increíble aventura! Explora, aprende y crece mientras descubres todo lo que Melbourne tiene para ofrecer.